Desde 1916 contábamos con un servicio energía eléctrica que al principio no era muy eficiente.
En 1919 se comenzó a instalar el servicio de aguas corrientes.
A fines de la década de 1919 se instalaron dos fábricas de soda y refrescos llamados chinchibira o chinchibila, que fue la primer gaseosa nacional; una de propiedad de Federico Otaola y la otra de Luis Canetti, además de una fábrica de hielo de los también propietarios de la Usina Eléctrica.
Evidente resulta que el agua de red no era muy potable, por cuanto la Municipalidad envió Notas a los fabricantes de soda y gaseosas y al de barras de hielo informándoles sobre quejas de los vecinos porque, “los sifones y las bebidas «anti alcohólicas» contenían muchas veces materias extrañas” y “el hielo, un olor nauseabundo”.
FOTOGRAFÍA:
1.- Camión distribuidor de “Sodería Otaola”, año 1920 estacionado en la calle Gobernador Eugenio Tello al 550 donde se encontraba la fábrica – En la esquina del fondo, Gobernador Tello y 9 de Julio, se observan edificios que continúan en pie.
2.- Maquinarias de la sodería en pleno funcionamiento. Fotografía aporte de Alberto de la Villarmois.
